El código abierto es aquel que está disponible para su revisión, uso, modificación y distribución. Es decir, es una fuente para la colaboración y el acceso libre que son indispensables para el desarrollo de innovaciones tecnológicas.
Además de ser seguro y adaptable, el código abierto permite maximizar los recursos disponibles y, por ello, cada vez con mayor frecuencia los gobiernos adoptan plataformas digitales y herramientas basadas en él.
Flexibilidad, agilidad, compatibilidad y solidez definen al código abierto, y esto es gracias al poder que tiene la colaboración para resolver problemas complejos de manera efectiva: acelera la innovación, fomenta la aportación de ideas, evita duplicidades innecesarias, y los modelos pueden ser probados y mejorados, garantizando la seguridad en su uso.
[El código abierto es una cultura que promueve la colaboración para estimular la innovación en un mundo que cambia constantemente. Hoy, por ejemplo, es un catalizador clave para la evolución de la Inteligencia Artificial (IA).]
La implementación de código abierto en los gobiernos no solo optimiza la eficiencia administrativa, al reducir costos y tiempos en la prestación de servicios, sino que también fortalece la transparencia y la participación ciudadana al garantizar el acceso abierto a los sistemas y la información públicas.
Un gobierno digital aprovecha herramientas tecnológicas para mejorar la gestión de los servicios públicos, asegurando accesibilidad, inclusión y protección de datos sensibles.
En este contexto, el código abierto es un aliado clave para los gobiernos, ya que reduce costos al eliminar la dependencia de licencias propietarias, fomenta la seguridad permitiendo auditorías abiertas y evita el “quedar atrapados” en tecnologías cerradas y propietarias, dando a las instituciones mayor control sobre sus soluciones digitales.
Además, su flexibilidad impulsa la innovación, permitiendo que desarrolladores adapten y optimicen las plataformas gubernamentales según necesidades específicas, consolidando así un ecosistema digital más eficiente, seguro y accesible para todos.
Esta cultura abierta se siente en pleno en México actualmente, tras el anuncio de la actual administración de la Presidenta Claudia Sheinbaum Pardo de promover la innovación pública para el desarrollo tecnológico nacional, creando una estrategia para la adopción y el uso de la identidad y ciudadanía digital, con miras a generar una comunidad tecnológica en torno a los gobiernos federal y estatales, que promueva la colaboración, la interoperabilidad, la innovación, la simplificación y la optimización de recursos públicos.
El Gobierno de México señaló recientemente que una persona realiza durante su vida aproximadamente 486 trámites, de los cuales 85% son estatales o municipales.
Este solo hecho explica una de las razones por las que el foco del gobierno de México está en llevar a cabo la digitalización más grande de la historia (trámites y servicios), estableciendo un programa de desarrollo tecnológico que dirija a México a un crecimiento social y económico nacional que lo posicione como potencia tecnológica y de innovación.
Si bien es una tendencia global la agilización de trámites gubernamentales, el actual gobierno ha anclado el desarrollo tecnológico a los objetivos, estrategias y prioridades del Plan Nacional de Desarrollo, enviando con ello una fuerte señal sobre su compromiso para este fin.
El gobierno digital que se instrumenta en el país es mucho más que simplificar los procesos para la apertura de negocios, ampliar la disponibilidad de trámites, homologar sus requisitos y mejorar el tiempo de atención y resolución. Constituye una oportunidad histórica para nuestro país, puesto que es una estrategia integral que incluye leyes, decretos, planes y reglamentos, y tratados comerciales internacionales.
Este nuevo entramado institucional es, sin duda, una transformación digital gubernamental con miras a la sustentabilidad tecnológica.
● La creación de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT) como una dependencia del Poder Ejecutivo Federal.
● Ley Nacional de Simplificación y Digitalización
● Principios de simplificación, Modelo Nacional de Simplificación y Digitalización y una sola autoridad a cargo de simplificación y digitalización con capacidades tecnológicas propias.
● Catálogo único de trámites, servicios y requisitos.
● Portal Único Ciudadano de Servicios.
● Sistema Nacional de Atención Ciudadana.
● Análisis de Impacto Regulatorio (AIR) eficiente.
Como lo ha anunciado la Presidenta de México, Doctora Claudia Sheinbaum, es momento de acelerar la actividad económica en bienestar de la población y juntos trabajar por la prosperidad compartida.
Por ello, no es casualidad que el gobierno digital también incluya en el nuevo entramado regulatorio:
● La creación de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones (ATDT)
● LLAVE MX Identidad Digital.
● Ventanilla Digital Nacional de Inversiones.
● Plataforma Nacional de Registros Civiles.
● Plataforma Nacional de Registros Públicos de la Propiedad.
● Plataforma Nacional Catastral.
● Internet para Todos.
● Programa Espacial Mexicano, con la Agencia Espacial Mexicana (AEM) y el Sistema Satelital Mexicano (MEXSAT).
● Centro Nacional de Tecnología Pública (CNTP) para promover el desarrollo de Capacidades Tecnológicas propias en los tres órdenes de gobierno.
● Repositorio de Código.
● Escuela Pública de Código para servidores: Desarrollo de software, programación, telemática y nube pública.
El código abierto juega un papel fundamental en la implementación de políticas de ciudadanía digital, porque facilita el acceso y promueve procesos colaborativos y transparentes, además de innovadores. El gobierno abierto es rápido, sencillo y seguro cuando posee a una comunidad tecnológica colaborativa que crece progresivamente; versión tras versión.
Sin duda, el código abierto es una herramienta para construir una República próspera y conectada, por representar una gran oportunidad para los gobiernos federal y locales que buscan modernizar sus servicios de manera eficiente, transparente y accesible.
En este camino, la cohesión entre empresas y sectores para apoyar el logro de los objetivos del gobierno de México será fundamental para establecer estrategias de colaboración con la comunidad tecnológica, políticas de adopción progresiva, y capacitación, entre otras.
Es un gran honor para Red Hat, una empresa con cultura abierta con 18 años en México, compartir la visión de la Agencia de Transformación Digital y Telecomunicaciones para instrumentar un gobierno digital que impulse a la consolidación de México como un país innovador y punta de lanza.
Conoce más sobre Red Hat, líder global de soluciones empresariales de código abierto, incluyendo Linux, cloud, contenedores y Kubernetes, que ofrece soluciones reforzadas que permiten el trabajo en distintas plataformas y entornos con facilidad, desde el centro de datos principal hasta el extremo de la red.
A medida que la IA evoluciona, el código abierto es clave para garantizar su desarrollo sustentable, promoviendo un ecosistema tecnológico transparente, accesible y libre de dependencias propietarias.
El código abierto ha sido el motor detrás del avance de la inteligencia artificial, permitiendo la colaboración global entre investigadores, empresas y desarrolladores.
Modelos y frameworks abiertos como TensorFlow y PyTorch reducen costos de mantenimiento y facilitan la integración entre sistemas sin depender de una sola plataforma. Esta accesibilidad fomenta la innovación en industrias clave, desde la de salud hasta la de ciberseguridad, al permitir la adaptación y optimización de modelos según normativas de privacidad y necesidades locales.
Red Hat OpenShift AI y OpenStack proporcionan una base flexible y escalable para el entrenamiento y despliegue de modelos de IA en entornos híbridos y multinube. La interoperabilidad con contenedores y Kubernetes reduce costos de infraestructura y mejora la eficiencia operativa. En sectores críticos como finanzas, salud y ciberseguridad, OpenShift AI permite analizar grandes volúmenes de datos en tiempo real, detectar fraudes y optimizar diagnósticos médicos con modelos de IA auditables y adaptables.
Con herramientas como Red Hat Insights, es posible predecir problemas antes de que afecten los sistemas empresariales. La automatización con Red Hat Ansible y OpenShift AI optimiza la administración de infraestructura, permitiendo que la IA opere con menor intervención humana y mayor eficiencia.
Javier Cordero
Director General en Red Hat NOLA
