La pandemia causada por el coronavirus SARS-Cov-2 aceleró la adopción del trabajo remoto en empresas y gobierno, al mismo tiempo que la Transformación Digital se convirtió en un reto que tiene diversos elementos a considerar. A continuación, haré un análisis de sus componentes más notorios.
- La multiplicación del lugar de trabajo
Enviar a los empleados a trabajar a sus casas hizo que, de un solo lugar de trabajo, ahora existan muchos más, con diversas condiciones de infraestructura o, a veces, sin la adecuada.
- Nuevos retos tecnológicos
Estas nuevas condiciones laborales implican la solución de desafíos que incluyen, no solamente la organización de las tareas que deben cumplir los colaboradores, sino también de seguridad informática y conectividad a internet.
- Cambios en las leyes por la pandemia
Justamente para responder a esta nueva realidad, la Comisión de Trabajo y Previsión Social en la Cámara de Diputados aprobó un dictamen que regulará el teletrabajo en México. De aprobarse la propuesta por el pleno de la Cámara, se reformará el artículo 311 de la Ley Federal del Trabajo (LFT), entre otras modificaciones.
La propuesta fue presentada hace dos años en la Cámara de Senadores y apenas el pasado 20 de julio de 2020 se turnó a la Cámara de Diputados. Esta es una muestra de los efectos de la aceleración de la vida digital causada por la emergencia sanitaria, que llevó a muchas empresas a utilizar el trabajo a distancia.
En Argentina, el Congreso aprobó el pasado 30 de julio la Ley de Teletrabajo que, entre varios puntos, establece el derecho de los trabajadores a la desconexión digital, es decir, a no ser contactados después de su horario de trabajo por sus empleadores.
- Medidas provisionales para regular el teletrabajo
Las organizaciones responden como pueden. Un oficio de la Secretaría de Relaciones Exteriores, enviado por el Director General del Servicio Exterior y de Recursos Humanos, Moisés Poblanno Silva, informó que “se dará prioridad al trabajo a distancia de todos los servidores públicos y, en especial, a las personas en situación de vulnerabilidad”.
En ese mismo documento se pide a los trabajadores “notificar a su superior inmediato a través de WhatsApp al inicio de la jornada su ubicación en tiempo real por ocho horas (abrir su conversación de WhatsApp, pulsar el botón “Adjuntar” y elegir la opción “Ubicación”. Después elegir “Ubicación en tiempo real” y elegir ocho horas”.
Estas instituciones que aparentemente se proponen cuidar la salud de los trabajadores, al parecer tratan de controlar el tiempo que los empleados dedican a trabajar.
- Productividad y home office
Para las compañías y los gobiernos es importante mantener la productividad, sin embargo, el panorama es complejo pues, por un lado, las organizaciones tratan de cumplir con las tareas laborales que pasan por la adaptación de los empleados a las nuevas condiciones laborales quienes ya no sólo necesitan un espacio de trabajo, sino también disciplina; y, por otra parte, las organizaciones deben plantear el cumplimiento de objetivos en vez de solamente horas de trabajo frente a la computadora.
- Seguridad digital pese a estar en casa
Mantener la seguridad de la información, especialmente de los datos personales que manejan los empleados de gobierno, es una tarea que podría complicarse si sus equipos de cómputo caseros fueron afectados por algún ciberataque. En este caso, los dispositivos comprometidos podrían servir como la vía de acceso a los servidores de alguna oficina de gobierno y, consecuentemente, causar fugas de información.
No obstante, al mismo tiempo existe un aumento de los riesgos de seguridad debido al uso de equipos de cómputo personales y teléfonos celulares para cumplir con tareas solicitadas por las organizaciones.
- La austeridad republicana digital y el COVID-19
Por un lado, está la decisión del gobierno federal de no invertir en equipos de cómputo y, por otro, el uso de equipos personales, de casa e incluso teléfonos móviles sin protección, sin usar redes privadas virtuales (VPN) y, en ocasiones, sin antivirus ni firewalls para trabajar con información de gobierno.
Finalmente, los factores anteriores podrían dar como resultado un incremento del nivel de riesgo en la exposición de la información gubernamental, pero, más allá de este panorama, está la ausencia de una Estrategia Digital Sustentable que permitiría una administración eficiente de las Tecnologías de Información y Comunicación (TIC) en ejes estratégicos como:
- Políticas
- Procesos
- Procedimientos (misión y visión)
- Diseño
- Implementación y administración
- Sustentabilidad