La tecnología de comunicación y colaboración puede ayudar a establecer un ambiente de trabajo que atienda las diversas necesidades de la fuerza laboral. Por su parte, los beneficios de la diversidad de pensamiento han sido bien documentados.
Un informe de Boston Consulting Group encontró que las organizaciones con equipos de gestión más diversos tienen un 19% más de ingresos debido a la innovación.
Sin embargo, para aprovechar de manera efectiva el poder colectivo de muchas personas diferentes y sus formas únicas de pensar, los líderes deben mejorar el empoderamiento de cada persona en la fuerza laboral para poder trabajar de una manera que les permita rendir al máximo.
Una forma de ilustrar cuán diversa es la fuerza de trabajo (en Australia) es comparar las necesidades de los introvertidos frente a los extrovertidos. Se ha estimado que los extrovertidos constituyen el 50-74% de la población y los introvertidos representan el 16-50%.
La autora más vendida y oradora de TED Talk, Susan Cain, ha investigado las diferencias entre introvertidos y extrovertidos, y cómo los líderes pueden ayudar a ambos tipos de personalidad para que rindan al máximo. Ella argumenta que cada tipo funciona mejor cuando está en su nivel óptimo de estimulación.
Por ejemplo, cuando en un ejercicio se les pidió que seleccionaran el volumen óptimo en sus auriculares mientras realizaban una tarea específica, los extrovertidos eligieron un nivel de ruido de 72 decibelios, mientras que los introvertidos seleccionaron sólo 55 decibelios.
Cuando trabajaban en el volumen que habían seleccionador para sí mismos, los dos tipos de personalidad estaban igualmente estimulados y realizaban tareas igualmente. Sin embargo, lo contrario se hizo realidad cuando se les pidió que trabajaran al nivel de ruido seleccionado por sus contrapartes.
Los introvertidos fueron sobreestimulados por el ruido fuerte y los extrovertidos fueron poco estimulados, casi aburridos, por las condiciones tranquilas; el desempeño de ambos grupos sufrió como resultado.
Teniendo en cuenta que el nivel de ruido es sólo una de las muchas diferencias entre la forma en que los introvertidos y los extrovertidos prefieren trabajar, es fácil entender cómo los líderes no saben acomodar a dos personalidades y conjuntos de necesidades tan contradictorios.
Asimismo, otro factor clave que deben considerar los líderes es la creciente necesidad de colaboración para fomentar la creatividad y la innovación, la fuerza impulsora original de la oficina de plan abierto.
De hecho, nuestra investigación mostró que el 81% de los trabajadores en Australia y Nueva Zelanda creen que trabajar en un entorno de plan abierto es importante para su productividad.
Entonces, la batalla entre el plan abierto y la puerta cerrada no es una que cualquiera de las partes pueda ganar realmente. Para mí, la respuesta radica en una inteligente combinación de los dos. Ofrecer opciones de trabajo flexibles puede formar parte de la solución.
Sin embargo, para fomentar la máxima productividad, los empleadores deben asegurarse de que aquellos que trabajan de forma remota sigan teniendo el mismo nivel de acceso a las herramientas y la tecnología que tendrían en la oficina.
De esta manera, aquellos que necesitan soledad para enfocarse pueden lograrlo fácilmente, pero cuando se necesita colaboración para cosas como tormentas de ideas y reuniones, la tecnología de audio y video conferencia también puede imitar estrechamente la interacción y el compromiso cara a cara.
En última instancia, como líderes, queremos obtener el mejor rendimiento de nuestra gente. Todos trabajamos de diversas maneras y tenemos diferentes impulsores de productividad.
Está claro que la tecnología de comunicación y colaboración puede desempeñar un papel para ayudar a establecer un entorno de trabajo que pueda satisfacer las diferentes necesidades de la fuerza laboral actual.
Con información de GovTech Review