El acelerado cambio tecnológico que vemos a diario, donde hoy tenemos avances en el Internet de las Cosas y mañana escuchamos de nuevos alcances del cómputo cognitivo o bien de la analítica predictiva, es el signo de una época que se mueve rápido, y muchos sabemos que las instituciones gubernamentales enfrentan estos retos y problemáticas con modelos que parecen del siglo 18. Cuatro copias, oficio firmado, procesos largos y tiempos más largos aún.
La buena noticia en este panorama desolador de un gobierno que se queda atrás ante el vértigo tecnológico, es que hay ejemplos de agencias gubernamentales que han encontrado formas creativas de ser más ágiles para enfrentar el cambio disruptivo. Presentamos algunos casos:
- Unidades dedicadas a identificar los cambios emergentes y desarrollar respuestas innovadoras. El modelo de «organización con tecnología de información bimodal» combina dos unidades de Tecnologías de la Información (TI) con dos objetivos y culturas diferentes entre sí. La primera unidad se enfoca en la eficiencia y estabilidad, maneja la operación de las TI. La segunda unidad, más pequeña trabaja en la innovación y el cambio, desarrolla enfoques creativos para problemas emergentes y ayuda al personal de la primera unidad a aprender cómo implementar estos acercamientos. La reconocida agencia de la ciudad de Boston, Oficina del Alcalde de Nuevas Mecánicas Urbanas, ha implementado este modelo y le ha dado una agilidad que es celebrada por su capacidad de respuesta.
- Uso de la creación comunitaria para encontrar soluciones a asuntos emergentes de manera rápida. En 2011 la ciudad de Mesa, Arizona, creo la plataforma de colaboración comunitaria (Crowdsourcing) «iMesa», diseñada para involucrar a los habitantes con el gobierno local y sus servicios. En los cinco años siguientes la plataforma iMesa generó más de 400 ideas, de las cuales 46 fueron implementadas. En esta plataforma se presentan las problemáticas y se permite a cualquier participante, dentro y fuera de la administración pública, que presente soluciones. Las agencias que presentan las problemáticas y encuentran soluciones dan premios en efectivo o algún otro reconocimiento a los ganadores.
- Redes colaborativas y fuerzas de tarea que unen organizaciones con misiones similares. Existen unidades al interior de las agencias de gobierno que tienen tareas y finalidades similares, pero requieren ayuda externa para identificar este camino común. Las fuerzas de tarea son este vehículo que ayuda a encontrar similitudes de misión, tal es el caso de los esfuerzos de datos abiertos, administración de redes sociales e incluso protección de datos; todas las agencias de gobierno deben trabajar estos temas y las fuerzas de tarea permiten trasladar conocimiento o bien unir a quienes lo han logrado con aquellos en el proceso de realizarlo y así aprovechar los esfuerzos ya realizados y lecciones aprendidas.
- Cultura ágil en toda la organización. La famosa afirmación de «así lo hemos hecho siempre» es el mantra que debe atacarse mediante el involucramiento de toda la organización en actividades continuas como hallar los pasos ineficientes, las zonas oscuras donde el trabajo se pierde y los puntos de riesgo. El liderazgo en este modelo es importante para inspirar a la organización para realizar cambios continuos.
Los tres primeros modelos se encontrarán más fácil de implementar ya que requieren del esfuerzo de pequeños equipos de innovación, mientras que el enfoque del número 4 requiere un cambio de la cultura organizacional, modificaciones a la capacitación, administración e incluso cómo se contrata.
Dados estos modelos, ¿cuál es el que puede adaptarse a tu organización?, ¿ya estás aplicando alguno?
Con información de Governing.