Desde hace algunos meses se habla mucho de la tecnología Blockchain (cadena de bloques), la cual se encuentra muy asociada a la moneda digital Bitcoin. Esta última es una aplicación específica de dicha tecnología. Para despejar dudas sobre qué es la nueva divisa digital y la base de datos llamada blockchain, recomiendo ver este video de una charla TED (Tecnología, Entretenimiento y Diseño) de Dan Tapscott, gran experto de desarrollo y evolución tecnológica, así como autor de múltiples libros:
Ahora quiero centrarme en el potencial de Blockchain en el mundo público y sus servicios. De hecho, varios estados ya están trabajando planes piloto en esta área, como Reino Unido, Dubai, Estonia y Singapur.
A modo de introducción (no pretendo hacer un análisis exhaustivo de dicha tecnología, esto sería para otro artículo), me gustaría recordar tres conceptos básicos.
- La idea que subyace es tener un libro mayor o ledger de transacciones verificables (autenticidad, tiempo, secuencia, identificación), en un esquema colectivo (nodos) que contiene un sello de tiempo (timestamp).
- Cada vez que se produce y valida una transacción (por múltiples nodos), ésta pasa a formar parte de la cadena y no pude ser modificada y/o eliminada. Esto hace que la historia de ese libro de transacciones se mantenga inmutable.
- Debido a que su validación es distribuida en muchos nodos, desaparece la figura del tercero confiable, por ejemplo bancos, servicios públicos, notarios, conservadores de bienes raíces y otros.
El modelo Blockchain se centra en los siguientes atributos:
- Crear y mantener una base de registro de transacciones, asociadas a datos existentes.
- Encriptar las transacciones.
- Validar y verificar la autenticidad y el origen de las transacciones por la vía de un esquema distribuido (nodos). Muchos nodos validan las transacciones y por acuerdo llegan al consenso de que la transacción es válida.
- Sello de tiempo de todas las transacciones, lo cual garantiza la secuencialidad.
La pregunta que a muchos les surge: ¿existe espacio en el ámbito público para el uso de estas tecnologías? La respuesta es definitivamente sí. Algunas de las características que esta tecnología presenta y que la hacen una herramienta adecuada para mejorar la gestión en el Estado son:
- Seguridad asociada a que la data original no puede ser modificada.
- No depender de un tercero confiable, con los riesgos y brechas de seguridad que ello implica.
- Trazabilidad completa de las transacciones que ha tenido una base de información.
- Bajo costo de validación y confirmación de transacciones.
- Vinculación de los datos originales con las transacciones que ésta tiene.
- Uso de tecnologías estándares y abiertas
Los espacios en los que creo que estas tecnologías pueden ser un gran aporte de valor público son:
- Gestión de expedientes: en el mundo público se administran todo tipo de expedientes, los cuales van incorporando información (transacciones) y cuya gestión se hace habitualmente en forma manual, con poca trazabilidad y potenciales riesgos de una inadecuada identificación de origen-destino. Adicionalmente es muy común que la historia de las transacciones no sea correctamente gestionada. Pensemos por un momento en expedientes judiciales, discusiones legislativas y solicitudes de derechos.
- Registros: los estados deben gestionar y mantener múltiples registros de personas, empresas y propiedades. En muchos países, estos registros se han digitalizado, pero el proceso se centra en mantener los datos y no sus transacciones asociadas, lo que puede asegurar su trazabilidad (fecha, origen, destino, acción).
- Entrega de beneficios o subsidios: hoy en día los estados entregan muchos beneficios a sus ciudadanos (monetarios y no monetarios) y es muy común que no exista un adecuado seguimiento de a quién se le entrega y bajo qué condiciones.
- Contratos: el estado debe gestionar múltiples contratos, muchos de ellos asociados la contratación pública, prestación de bienes y servicios, o concesiones. Dado que los contratos tienen transacciones relacionadas con su ejecución, es que son un candidato potencial para utilizar Blockchain.
- Identificación: uno de los desafíos que están tenido los estados es poder identificar a las personas en sus interacciones online, pero en esta área no hay un consenso claro sobre el aporte que el Blockchain podría prestar.
Los países de la región debieran iniciar un proceso de evaluación y aplicación de estas tecnologías, al menos en usos acotados, ya que sus ventajas están a la vista.
Consulta el artículo original en la página web de Alejandro Barros.